Judith Rashleigh es una joven prometedora, bella, inteligente y con alto nivel académico; sin embargo, su trabajo como asistente en la British Pictures, una de las dos más importantes casas de subastas de arte de Londres, no está a la medida de sus ambiciones. Ella es el personaje central de Maestra, de L.S. Hilton, un thriller que cambia las convenciones de la novela negra.
La protagonista de esta historia es polémica por sus actitudes desenfadadas ante la sexualidad. “Las mujeres todavía tienen que cumplir con muchas reglas en la página escrita, se espera que les motiven las emociones, el sentimiento y el romance. Las mujeres suelen ser bastantes pasivas y tenía interés en crear un personaje femenino que rompiera las reglas, me pareció que sería divertido”, explica Hilton.
Y es que, a partir de un reencuentro con una antigua amiga del colegio, la vida de Judith Rashleigh comienza a tomar giros inesperados. Comienza a trabajar como acompañante en un bar, donde conoce a James, un millonario que cambiará su vida en maneras que no esperaba.
“Una de las cosas con las que no quería trabajar eran los convencionalismos de la novela negra clásica, por ejemplo la relación entre el detective y la mujer fatal”, detalla la autora, quien está preparando la segunda parte de esta historia que será una trilogía.
A la par que Judith conoce a James, se enterará de un fraude en la casa de subastas donde trabaja, lo que detona que pierda su empleo. Sin embargo, ¿se quedará de brazos cruzados ante esta situación? ¿A dónde y de qué será capaz su deseo de venganza?
¿Por qué situar al personaje en este ambiente? “Creo que el mundo de arte es un nexo extraordinario de belleza, deseo y dinero e inevitablemente eso hace un entorno bastante corrupto. Quería meterle detalles suficientes para que el lector sintiera cómo funcionaba el mercado del arte”.
Asimismo, algo que destaca en la historia es el interés constante del personaje principal por las marcas y la moda: “Fue una de las críticas que se le hizo al libro, no pienso que la moda sea superficial. A mí me parece que Judith, quien tiene 25 años, es el producto de una generación que ha interiorizado y absorbido la idea de marcas, así que es realista que ella se exprese por medio de su ropa. Además me encanta ver las revistas de moda porque son placenteras, no me puedo gastar miles de libras en la ropa pero me gusta imaginar que puedo hacerlo”, detalló la autora.
Sin embargo, otra de las características de Judith Rashleigh que ha causado polémica es la seguridad que tiene al ejercer su sexualidad. L.S. Hilton añade que le parece una paradoja que en la literatura negra una mujer sea abusada y sometida a grandes torturas sin que eso importe mucho pero “mostrar a una mujer sensual, que no pide permiso a nadie y que disfruta de su propio cuerpo es lo que impacta a la gente. A ella no le importa si le cae bien o no a la gente, no está buscando aprobación, sencillamente está haciendo lo que quiere hacer y no le da vergüenza ni se disculpa” apunta.
Y aunque el dinero y los lujos son una constante, considera que su personaje no busca el poder por el poder. “Le interesa tener la libertad de vivir su vida bajo sus propias condiciones, más que nada el poder es un medio no un fin. Creo que las mujeres siguen teniendo una relación muy incómoda con el poder, será maravilloso si nosotras lo adoptáramos, lo asumiéramos más”.
Maestra, de L.S. Hilton, es una publicación de Random House Mondadori, se ha editado en 32 países y se convertirá próximamente en una película, el guion de la misma ya está terminado. El segundo libro de esta trilogía se publicará en la primavera de 2017 y se espera el tercero para un año después.