Tal vez ni un cielo cubierto de azulejos vintage nos parecería tan excéntrico hoy. A veces lo original se ubica en los detalles no visibles y en esta nueva cantina se encuentran en la carta.
Cuentan con muchas opciones de mezcales y los espirituosos de cajón. Un elemento que da el toque excéntrico es el que ofrezcan charcutería, además de tacos de pato al pastor, hamburguesa de puerco y queso azul o un sándwich de ostión ahumado (especialidad de la casa).
Para quienes no perdonan lo caldoso, una sopa de lentejas con jocoque y hierbabuena resulta apetecible. ¿Cordero en salsa de hoja santa? Por qué no. Ya entrados en salsas, las de aquí son exquisitas. De las cinco que ofrecen, destaca la macha con serrano, jalapeño y albahaca.
Tiene al frente una pequeña terraza con sillones muy cómodos para quienes deseen estar al nivel de la calle. Al entrar, del lado derecho domina un conjunto de periqueras y del izquierdo la barra de bebidas, todo sobre duela y muros casi limpios.
Las opciones para ubicarse no terminan ahí. Quien desee “crudear” con dignidad, puede sentarse en la barra fría y solicitar un ceviche de huachinango, con la respectiva cerveza de camarón.
Para la noche, el lugar cuenta con mesas enmarcadas por un muro de ladrillos y ese azulejo vintage que resume un estilo contemporáneo bien equilibrado.
Al fondo, una terraza dispone de mesas y sillones que resultan irresistibles para gozar de la brisa nocturna de verano. Dos elementos clave de una buena cantina: la música y la bebida. Entre la indietronica de bandas como Miami Horror puedes deleitarte con los cocteles de la casa.
Optamos por el habanero, un hada tan peligrosa como suculenta que combina chile macerado, agua mineral y lo que más llamó nuestra atención es una bellísima rockola de acetatos al fondo del local. Aunque funciona no está disponible; triste.
Música lounge inofensiva que se pierde a favor de un local para extranjeros, gente del barrio y ocasionales en Ecobici, mezcal que se resuelve en un trago dulce, picante y fresco. Si The Postal Service con habanero y mezcal es excéntrico, de aquí somos.