Limantour CDMX
Foto: Alejandra Carbajal
Foto: Alejandra Carbajal

Antros y bares en la Roma

Baile, cerveza, cocteles y lo mejor de la vida nocturna en una de las colonias con mejor espíritu de fiesta en la Ciudad de México

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La Roma es una de las colonias más interesantes de la CDMX: los restaurantes y cafés en la Roma tienen propuestas de alta gastronomía, y si buscas bien encuentras restaurantes buenos, bonitos y baratos en la Roma

Además, ir de shopping en la Roma es parte de la experiencia, ¡ofertas ilimitadas! Si cae la noche, acude a los lugares para precopear en la Roma para calentar con lo mejor de la vida nocturna.

Recomendado: Los 20 mejores bares de la CDMX.

Los mejores antros y bares en la Roma

  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Musak
Musak
Una nueva casa para jazz, soul, disco, funk y electrónica: Musak, el hi-fi listening bar del restaurante Tres Tonalá, cuya mixología fue curada por Mica Rousseau (Fifty Mils) y supervisada por el italiano jefe de barra Raffaele Chinea. Bajo el mismo formato de un speakeasy, hay que preguntar al llegar, pues la magia de la entrada ocurre tras una pared que se mueve. En cuanto ingresas la música penetra de manera diferente: el espacio parece un ecualizador gigante que da total libertad a la música sin perturbar el volumen de tus conversaciones. Elegante y Gatsby-neano, toma asiento en los aterciopelados sillones y rodéate por los tonos dorados y azul marino. Deja que Billy Preston (la figura del soul) sonando al fondo te guíe sorbo por sorbo al frank sinatra, un trago seco con tequila, tonos de clavo, nuez y pimienta con una crusta de chocolate que se derrite entre mordidas. BB King no apareció con su guitarra, pero sí en una muy agradable mezcla de bourbon con coco y vainilla para aquello de lo tropical, sumado con piña tatemada, amaro y limón amarillo. Serge gainsbourg conserva la misma actitud de este versátil compositor parisino, es un trago de mezcal con licor de chile ancho y rebajado sutilmente con té roiboos. A la sensualidad de Musak se le añaden sesiones en vivo de djs y grupos invitados, ofertas frescas que complacen a melómanos y sibaritas por igual. Total, del buen trago y la buena música nadie te quita lo bailado. 
  • Antros
  • Roma
  • precio 1 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Patrick Miller
Patrick Miller
Por más de dos décadas, su piso ha atestiguado los mejores pasos de la urbe dentro de sus círculos de dance-offs. Ahí, todo tipo de personajes de la ciudad –bailarines, hipsters, fresas, rucos y taxistas– se unen por el amor al desgaste de suelas. Lo mejor es ir en las noches de los ochenta, noventa y dos miles, que son mucho más amigables que las intensas de high energy, que podrían parecen muy sanas para los inocentes: todo mundo tiene una botella de agua en la mano. (Para saber qué toca hay que checar el calendario en la página). Vale la pena asomarse un rato al círculo de competencia de baile y ver los asombrosos pasos de quienes van cada viernes. Ellos, los héroes del lugar, se toman el baile en serio y van de pants, aunque nunca faltan las que no supieron y fueron de vestido y tacones. Lo más recomendable es ir cómodo. Todo esto da un feeling de esas películas taquilleras adolescentes de concursos de baile. Tras la adictiva primera visita podrás llegar a pensar que los viernes fueron exclusivamente creados para celebrar en esta bodega de paredes pintadas de colores neones, que bien podría haber sido un lugar de laser tag. Una bola disco y vigorosas luces estrambóticas son más elementos del encanto propio del lugar. Entre tanto baile, y a falta de aire acondicionado, el sudor fluye sin pudor alguno. Para saciar la sed en este magno-sauna hay dos opciones: agua y cerveza. Comprarlas implica hacer una fila (kilométrica, a veces), conseguir una ficha y cambiarla en la...
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  • Antros
  • Roma
  • precio 2 de 4
  • 5 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Si no estás en la lista de invitados, si no eres amigo de Zemmoa –la cadenera travesti– o si no cuentas con tarjeta o anillo de membresía, pasarás un momento incómodo afuera de una puerta cerrada mientras una pequeña cámara te observa. Entrar a uno de los mejores antros de la ciudad no es fácil, pero si lo logras querrás regresar cada fin de semana. M.N. Roy, “Em. En. Roy”, “Monroy”, “Roy” o como quiera que le llames, lleva el nombre de la persona que habitó la casa que hoy ocupa este ecléctico espacio arquitectónico: Manabendra Nath Roy, revolucionario, activista y teórico indio que a principios del siglo pasado fundó el Partido Comunista Mexicano. Un siglo después, en lo que alguna vez fue una guarida socialista, hoy podrás encontrarte a León Larregui de Zoé (socio del lugar) dando vueltas por ahí o a Adanowsky y otras figuras de la escena artística poniendo discos. Al cruzar la puerta negra de la entrada, la creación de los arquitectos Emmanuel Picault y Ludwig Godefroy contrasta con la descuidada fachada exterior. Un pasillo claroscuro, con paredes de piedra volcánica grabadas con arte puuc te llevarán al cuarto principal. De lado derecho, el DJ booth se alza debajo de paredes de madera de doble altura que asemejan una pirámide, mientras que del lado izquierdo, la barra principal se extiende debajo de altos techos y paredes con recubierta de cobre. Para tomarte un descanso, sube al segundo piso, donde una fila de columpios se prestan para platicar con trago en mano y...
  • Gastropubs
  • Roma
  • precio 3 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Jazzatlán Capital lleva más de 10 años en México. El espacio bohemio nació en Cholula, Puebla, para que cualquier visitante deleitara el gusto y oído. A finales de 2018 se extendieron más allá de las tierras poblanas y el proyecto fundado por Rodrigo Moctezuma aterrizó en la Roma. Con restaurante y tap room, ya tienes un nuevo lugar para escuchar jazz en la CDMX. En el lugar se toma chela artesanal y se ofrecen principalmente antojitos mexicanos, pero lo más importante es el jazz. La cartelera cambia cada mes. En el segundo nivel de esta casona se encuentra el pequeño escenario para escuchar bandas en vivo, como Champetos del Jujú,  con música africana y caribeña con ritmos de jazz, y JAB/Jenny Beaujean.  Si el antojo poblano acecha antes de las horas fiesteras, hay menú completo con sándwiches a la parrilla, hamburguesas y tacos, como el de quintoniles y tlalitos: esos crujientes trozos de chicharrón que agarran sabor del picante rico. Para beber, el espadín de la casa es la compañía ideal; si puedes, tómalo derecho. De la selección de cocteles, probé el ella fitzgerald por el simple antojo del gin (aunque como consejo: dedícale las noches de jazz al mezcal). El coctel lleva guanábana, limón, jarabe y aroma de cardamomo y albahaca; fresco y de presentación coqueta, grande de tamaño y cumplidor para relajarse.  Espera a que caiga la noche para adentrarte en el universo jazzero. Yo llegué a las 11pm de un viernes y la energía se desvaneció poco tiempo despúes (¿mala...
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  • Coctelerías
  • Roma
  • precio 2 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Una cortina de terciopelo negro resguarda un tesoro para las y los amantes de los tragos con personalidad y lugares con estética bien cuidada en la Roma. Subiendo la escalera de Puerto Prendes, al entrar te recibe una atmósfera íntima, un salón privado decorado con destilados e iluminación tenue en cada mesa; después de todo las polillas son discretas, ¿no? Aunque cuentan con seis elecciones de introducción, acertada elección de destilados nacionales, se pueden probar reversiones del negroni o martini con finas técnicas de coctelería, inspiradas todas en el apodo de Paola Álvarez, “Polilla”, la dueña de este bar.   Paola tuvo esta idea radical de operar un bar y tomar un espacio de hombres para hacerlo 100% femenino. Pensó que resignificar el mote de “oveja rebelde” de la familia sería una fórmula ganadora de la mano de Gabriela Lozada, de Bar Brujas, que le dio a la barra el banderazo de salida. La carta está inspirada en las polillas, su alimentación, su hábitat y la belleza que se encuentra en ellas, en lo diferente.  Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Time Out México (@timeoutmexico) Nosotras probamos Oria que usa Abasolo como base para integrar el toque de fresa y menta al Lillet blanc, bastante bien para empezar. Pedimos unas palomitas de pollo y humus para compartir de buen sabor, destacamos lo asequible del precio —por la zona– que es bastante decente. Seguimos con una Bilienata que lleva Campari, Carpano Rosso y...
  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Los hermanos Ricardo y Yayo Nava, con su vasto conocimiento en el mundo coctelero, se embarcan ahora en un espacio propio donde rinden homenaje a su abuelo Mauro, quien se muestra con una actitud interesante detrás de sus gafas oscuras en varias de las fotos que adornan los rincones de este bar.  Antes de la comida, en Orizaba, su abuelo se daba un tiempo para relajarse con un aperitivo a la manera italiana. Un vermut, un amaro o un negroni que nos abstraiga de las tensiones laborales y nos prepare para lo que sea que venga después, sea una comida en familia o un gran banquete. Ricardo nos cuenta que la inspiración tras el concepto fue justamente la época en que su abuelo rondaba los cuarenta años. El diseño interior hace referencia al Milán de los años 70, muy ad hoc con el impulso que quieren darle a los licores clásicos para tomarse a media tarde.  No es novedad que con poco tiempo abierto ya es difícil conseguir mesa si no es por reservación. De los cocteles bajo el nombre de “Sabores Legendarios”, el icono es el Maurito, un trago claro y burbujeante con mezcal, Lillet Blanc, jerez y un toque de guayaba. Otro que nos recomienda Ricardo es el Negroni 1929 (Gin, vermut rosso, campari, nibs de cacao y fresa); si quieres algo más mexa, prueba el Mango Salad, con tequila, tomate y mango en un coctel transparente, ligero y un poco peligroso.  Para acompañar, hay botanas también muy italianas. Mi favorito fue el plato de quesos maduros que despiertan las notas umami de los...
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  • Pulquerías
  • Roma
  • precio 1 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Este club se encontraba en República de Salvador en el Centro, pero recientemente mudó su concepto de pulquería-foro-punk a una casona de la Roma que recuerda la tradición okupa, de los tiempos en los que los punks invadían casonas abandonadas para vivir o montar salas de ensayos y hasta conciertos. Funciona con dos niveles: el primer piso, en el que hay varios cuartos para un deambular a un ritmo más relajado y que también suelen funcionar como salas de exposiciones para promover obras de artistas emergentes. La planta alta cuenta con un pequeño escenario en el que no sólo se presentan bandas de música, también es un espacio disponible para eventos culturales, presentaciones de libros, lecturas o debates. Los precios son accesibles (a veces desde los $20), la barra es famosa no sólo por las cervezas sino por la carta de curados de pulques y algunos platillos para degustar. Si bien es un lugar de raíces punk, es común escuchar secuencias de tendencia new wave, dark, mucho postpunk, industrial y gótico. Son muy alivianados para complacer a los asistentes siempre y cuando los géneros musicales sean primos cercanos. Quizá los baños se pasen de punk, pero bueno, es parte de la experiencia.
  • Roma
  • precio 3 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Este cocktail bar se posicionó hace más de diez años como una gran opción para quienes aman experimentar con la alta coctelería, antes de que nacieran muchos de los bares de cocteles que ahora pueblan las listas de los 50 Best. Fuera de los cocteles empalagosos o demasiado frutales, aquí han respetado la historia de los licores sofisticados. Siempre emparejados con buena música, especialmente los miércoles que hay tocadas en vivo.  Unas escaleras al lado de Loup Bar te conducen al lugar, un tanto secreto y oscuramente seductor, que se volvió famoso por servir absenta, la bebida eternamente asociada con el medio artístico parisino del siglo XIX.  Si quieres la experiencia auténtica, pide esta bebida (que tienta a cualquiera a portarse mal) en una fuente de cristal antigua. O prueba alguno de los cocteles que la contienen, como el Artemisa Sour, una clásico que brilla (literalmente tiene luz) sobre la barra. Además del absenta Satvrnal, lleva mezcal espadín, miel de rosita de cacao, limón, toronja y clara de huevo.  Otro de sus signature cocktails es el negroni más salvaje que vas a probar, se llama Negrosky y lleva sotol, Cynar, Aperol y Fernet. No te asustes, no todo aquí es tan intenso, si quieres empezar leve, mi recomendación es un fresco Salmoncito, con ginebra, Campari, toronja y agua tónica para acompañar tus aceitunas o una tabla de quesos del rancho Cuatro Encinos. Te recomendamos: Rumores Butcher shop
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  • Coctelerías
  • Roma
  • precio 4 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Hotel Casa Awolly
Hotel Casa Awolly
Me avisaron de un bar –cuyo nombre hay que preguntar dos veces– en donde los tragos estaban excelentes, y que según esto, servían un tuétano increíble. Con toda sinceridad, no imaginé la magnitud de lo que se escondía en Sinaloa, en plena Roma. Me perdí entre Medellín y Monterrey, caminé la cuadra sin sospechar que el lugar no posee un letrero exterior. Lo descubres por sus anfitriones en la entrada, casi como escoltas de seguridad. Iba sin reservación, pero no me iría sin descubrir el misterio así que le eché ganas. Llegué al comedor ubicado en la planta baja, mis sentidos se saturaron al procesar la decoración y fue entonces que comenzó el surrealismo. Todo era elegante, simulaba un patio con un piso verde de patrones circulares que se extendían a la pared y hacia el techo. Me sentaron junto a un área privada con una mesa de destellos caoba y rodeada por un librero color turquesa. En una pared, arriba de todos, proyectaban un filme de Hayao Miyazaki. Averigüé que la cocina era de Irak Roaro y le regalo mi 2017 por el tuétano con topping de short rib. Hornean el hueso con migas de panko y chiles secos, encima tenía trozos de short rib de sabor acaramelado y unas cebollitas con sabor ácido. Acompañado de una salsa martajada de jitomate y tortillas calientitas. Quedé con el ojo cuadrado: no probé una mejor receta en todo el 2016. Lo acompañé con un coctel aggi-doggi de ron y campari, lo especial es que lo hacen con una compota de ciruela con...
  • Bares de vino
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Llega una nueva propuesta para los que nos gusta tomar leeento y a gusto. Una de mis cosas favoritas en esta vida es conocer barecitos donde precopear, ir por traguitos coquetos después de comer, o cenar en un ambiente festivo sin que sea un antro tumultuoso.  Con la selva como fondo, el personaje principal de este bar es un oso perezoso, un animal al que no le apetece ir al mismo ritmo, baja las revoluciones y disfruta con calma la vida. El lugar cuenta con dos pisos, donde se cuida la luz, las formas y los colores.  Sobre el ambiente, puedo decir que al ser tan reciente su apertura, apenas está empezando a tomar forma, pero el team es sumamente amigable, te mostrarán las diferentes opciones a partir de tus gustos mientras escuchas todo tipo de música, desde pop hasta banda, o las novedades del DJ invitado.  Lo fuerte acá es el vino, con una curaduría que no tendrías en cualquier bar. Espumosos, blancos, rosados, naranjas y claro, tintos. Con etiquetas de España, Argentina, Italia, Alemania y México, las cuales irán cambiando según su stock. También lee: Bares para melómanos en CDMX También hay coctelería clásica, de autor, chelas y tragos derechos. Nos decidimos por su cóctel insignia, el Perezoso, preparado con vino rosado mezclado con guayaba, cordial de fresa con ruibarbo (una planta parecida al apio de tono rosa, dulce) y aperol. Es un trago para paladares que aman lo dulce, se siente la fresa, la guayaba, y aunque tiene un grado alcohólico alto, lo disimula...
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  • Coctelerías
  • Roma
  • precio 3 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Licorería Limantour
Licorería Limantour
La renovada fascinación por la coctelería en México surgió con un nombre: Limantour. Fue uno de los primeros bares en nuestra ciudad que decidió salirse de la vía y ofrecer una experiencia que se aleja de una simple barra con cocteles que no van más allá de los martinis.Aquí, la ciencia de las bebidas llega a niveles insospechados, con combinaciones etílicas que resultan sorpresivas al paladar; sus tragos incorporan ingredientes dulces, amargos, hierbas y bitters, mezcales y gin, en un juego constante que homenajea tanto a aquellos bartenders de los años veinte, como busca innovar en sus mezclas.Es común encontrar a reconocidos bartenders invitados detrás de la barra, y por temporadas es posible toparse con concursos que giran en torno a temáticas específicas (gin tonics o cocteles con té, por mencionar algunos).El menú de Limantour hace una referencia a un viaje por el mundo, a través de 20 cocteles. Con un trago, podemos sentirnos en una cantina antigua en el centro de Buenos Aires, en un sencillo pub escocés o en un bar underground de Brooklyn.Me decidí por un road trip a Oaxaca con el jamaica mezcal, que lleva bitters de chocolate. El trago se sirve en una de esas jícaras que encontrarías en cualquier mezcalería cercana a Monte Albán. El primer sorbo quema delicioso; el calorcito se apodera de tu garganta para bajar directo a tu corazón. Unos segundos después, viene el retrogusto de chocolate, sorpresivo, casi imperceptible pero cautivador.Después, viajé a Argentina...
  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Es un cliché, pero muchas veces, “de la vista nace el amor”. La Vista no es la excepción. En un momento donde la coctelería mexicana ha logrado estar en las primeras posiciones mundiales de listados internacionales como The 50 Best Bars, las propuestas no paran, y cada vez son más complejas. Hoy los bartenders y mixólogos ya no sólo se preocupan por ofrecer cocteles con buen sabor, sino que intervienen factores como la sustentabilidad, el consumo de azúcar, el diseño, la cristalería, las nuevas tendencias, las técnicas y el uso consciente de ingredientes de temporada. “La coctelería ya está al nivel de la gastronomía en la industria de alimentos y bebidas. Anteriormente, quizá, la coctelería estaba un poco atrás y se dejaba de lado, pero hoy están a la par”, nos cuenta Xchel Montoya, el bar manager de La Vista. Por fuera, pasa desapercibido. Por dentro, es un escape sensorial donde el diseño y la música juegan un papel relevante. Luces tenues, bocinas de madera confeccionadas artesanalmente en Berlín, muebles sencillos y materiales como concreto dan vista al diseño arquitectónico. La música es ecléctica, lo mismo hay boogaloo que disco, funk, rock, blues, house y electropop, el sonido proviene siempre de la colección de viniles, que se deja ver tras la consola del dj. Para Montoya, quien se formó en barras de bares como Ticuchi, Ololó, Artemisia y Minos, el tema de la sustentabilidad es esencial. “Dentro del bar hay mucho desperdicio de frutas y verduras, lo que yo estoy...
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  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Café Tacobar
Café Tacobar
Todo el trabajo de carpintería, diseño y equipamiento en la barra, las repisas y el acomodo eléctrico del local lo hizo Khristian de la Torre, uno de los personajes más brillantes de la escena de la coctelería nacional. Su trayectoria nos remonta a los inicios de Maison Artemisia, que solía ser uno de los mejores, y a otros renombres de la vida nocturna capitalina como Jules Basement y M.N Roy. Estuvo varios años fuera de foco, incluso fuera de México, trabajando con diferentes marcas de destilados como asesor y mientras terminaba de aterrizar un proyecto personal: armar su propio bar. Después de cuatro meses de arduo trabajo, Café Tacobar abrió en la Roma como una pequeña cafetería que desde las 9am ofrece café, tacos, cervezas artesanales y tragos de añoranza clásica. Detrás de un gran bar hay una mano experta y aquí esto cobra un sentido literal pues el único que abre, cocina, prepara cocteles, sirve, lava y cierra es Khristian; y así seguirá hasta que su plan de negocios indique lo contrario. Como buen bartender sabe que la clave del éxito en este tipo de lugares es la interacción con los clientes; así que bienvenido a su casa, siéntate en la barra (donde tendrás tu propio cajón con servilletas y plumas) y descubre lo que el anfitrión convida. Para comenzar el día, dar inicio a una noche de relajación o como digestivo hay que pedir un café el cairo, con un doble expreso de intenso café chiapaneco, perfumado con cardamomo y un toque de azúcar morena que le da notas...
  • Antros
  • Roma
  • precio 2 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Todos los caminos llevan a Mama Rumba. Quien no ha ido puede considerarse extranjero en la ciudad. Lo revisitamos por ser catedral del mojito en el DF y para comprobar que luego de 21 años sigue siendo referencia obligada del guateque cubano en la Roma. Nació como un centro de gastronomía caribeña y creció por gracia de un grupo de teatreros cubanos que llegaron para trabajar ahí, nos cuenta Luis Tukio, su gerente. Su ambiente ha ganado tal fama que igual ha celebrado ahí su cumpleaños el director de cine Martin Campbell (La máscara del Zorro) o la actriz Catherine Zeta Jones. Y si tienes suerte, en una visita casual, podrías encontrarte a Johnny Depp y Javier Bardem, pues justo ahí estuvieron días previos a la grabación de la película Antes de que anochezca. Todas las noches hay grupo en vivo y cada quince días está Manolito el imitador de Celia Cruz. La oferta musical la completan  grupos como Van Van, Paulito F.G., Bamboleo, Charanga Habanera, Elito Revé y en su momento el legendario ensamble Buenavista Social Club. Pero sin duda, al menos para las chicas, el día idóneo es el miércoles, pues no pagas cover. La disposición de las mesas permite que los dos pisos del lugar sean una pista de baile enmarcado por la barra de madera y tabique. Las bebidas clásicas son el mojito clásico, la cuba libre, daiquirí, o la cervezas cubanas Bucanero y Cristal. De platillos, el chef recomienda las masitas de puerco, los sándwiches cubanos, croquetas, mariquitas o el plato cubano. El...
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  • Coctelerías
  • Roma
  • precio 3 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Departamento
Departamento
La comunidad fiestera de la CDMX a veces prefiere quedarse en casa, aunque eso no quiere decir que el desmadre se encuentre temporalmente suspendido; la próxima vez que pregunten dónde es la fiesta, la respuesta que tienes que dar es Departamento. El nombre de este bar te explica lo que te espera, un interiorismo que te recordará al depa de un amigo listo para agarrar la fiesta, con todo y tornamesa en la sala y luces tenues que te incitan a quedarte durante horas discutiendo sobre los artistas en los discos de vinil; cada elemento de Departamento está pensado para despertar tu calor hogareño e íntimo. Ya que te sientes como en casa decides si bailas o platicas. La propuesta musical embona con el concepto y con la colonia; suena en su mayoría beats relajados de música electrónica con dj en vivo, hasta un poco de rock en inglés y en español. Es el lugar ideal para beber una cerveza y quitarte la sed, unos whiskys cuando quieres enfriar los pensamientos y relajarte, o unos mezcales para brindar por la noche y por tus anfitriones que pusieron la casa; sólo recuerda avisarles antes de llegar, contáctalos por Facebook y haz reservación.
  • Antro
  • Roma
  • precio 2 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
San Luis Club
San Luis Club
Con un gran letrero luminoso presumen de ser “su lugar romántico de México”. Esta es la entrada a un salón de baile con 73 años de tradición. Su aire retro de inmediato transporta a una época de machos y ficheras. Una mujer ataviada con un vestido negro aterciopelado recibe a quienes ingresan a este submundo ficheril. La decoración es igual a la de cualquier cabaret estancado en los años cincuenta: luz tenue, tonos rojizos, espejos en las paredes y chicas de falda corta sentadas en las piernas de los comensales u ofreciendo un baile por 30 pesos. Además de grupos de señores que pagan por la compañía de alguna chica, también van congregaciones de hipsters y expertos en salsa que acuden para bailar con música de orquesta en vivo. Por aquello de la ficha, no hay que extrañarse de que pidan consumo mínimo (puede ser de hasta 400 pesos), o que un refresco chico o una cerveza cuesten 55 pesos. Todo esto son pequeñeces por la experiencia de ser parte de un lugar donde el tiempo parece haberse detenido.
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  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Hace más de cien años, en la Roma, existía un café que se anunciaba como Café Europa, pero que era conocido por la comunidad literaria de la época como El Café de Nadie. Se dice que ahí, poetas como Manuel Maples Arce y Germán List Arzubide iniciaron con la corriente literaria Estridentista, que llamaba a los artistas e intelectuales del momento a dar cuenta de la transformación del mundo a través de las artes y el escándalo. Ahí, en el Café de Nadie, intelectuales y artistas se juntaban en tertulias llenas de café, tragos y cigarros. Un siglo después después, y también en la Roma, otro Café de Nadie acaba de abrir sus puertas. Y el espacio se antoja para debatir y compartir junto con un café o un buen trago como lo hicieron aquellos poetas. El Café de Nadie es un poco de muchas cosas. La columna vertebral de este proyecto es la música, curada por un grupo de djs que durante 10 años trabajaron en la selección de viniles que hoy funcionan como el eje sonoro del espacio. A veces, la música corre por cuenta de Café de Nadie, y en otras ocasiones tienen djs invitados. También se rifan con la carta de alimentos. Todas las frutas y verduras provienen de Arca Tierra, una red en Xochimilco de productores agroecológicos que trabaja bajo un esquema de comercio justo. Por lo mismo, en el menú predominan las verduras y las opciones vegetarianas, como el tiradito de jícama o el aguachile de coco y sandía. Pero también tienen opciones carnívoras, como el sándwich de pollo, o, si...
  • Coctelerías
  • Roma
  • precio 3 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Gin Gin
Gin Gin
“El gin tonic ha salvado más vidas y mentes de hombres ingleses que todos los doctores del imperio”, dijo alguna vez Winston Churchill quien —además de ser un gran líder político— era un loquillo al que le encantaba bromear, razón por la que decía cosas como la anterior. Todos sabemos que el gin tonic no sólo ha salvado las vidas y las mentes de ingleses, sino de gente de todo el mundo, incluyéndonos a los mexicanos. Es cierto que nosotros tenemos el tequila y el mezcal, pero ambos están destinados a la fiesta absoluta o al tratamiento contra el mal de amores. El gin es para otros momentos. Es uno de los destilados favoritos por su frescura, su suavidad y las benévolas bayitas de enebro de las que está hecho y que, desde épocas ancestrales, se consideran medicinales (punto extra para Churchill). Así que podemos concluir que el Gin Gin es una suerte de botica disfrazada de bar, cuya carta presume una gran variedad de pócimas curativas en forma de gin tonics que, si bien respetan al clásico (hecho con gin, agua tónica y una rodajita de limón), nos regalan nuevas maneras de disfrutar este viejo gran trago. Tres imperdibles son el vellocino de oro (gin, aceitunas, romero, aceite y rodajas de limón griego y agua tónica), el acapulco golden (gin, infusión de mate y coco y agua tónica) y el acidito mexican pimms (gin infusionado con rooibos y frutos rojos, cinzano, extracto de jengibre, jarabe natural, jugo de limón, mix de frutas y ginger ale casero, decorado con un trébol...
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  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
¿Te imaginas un bar sin botellas en la barra, y donde no tengas que esperar a que te preparen tu coctel? Ahora existe y se llama Outline. El concepto de este  bar recién abierto va a cambiar la forma en la que entendemos las barras, ya que aquí todos los cocteles están preparados previamente y se sirven de grifo. El espacio es enorme, al ver la entrada, a un lado de Delfino Café, no piensé que fuera tan grande, pero pasando el mural de Smithe, se abrió la planta baja en toda su dimensión, protagonizada por la extensa la línea coctele de draft y la torna que será tomada por los DJs sorpresa, y aún faltaba la gran terraza rodeada de vegetación en el piso superior.  Se nota que aquí hubo mano de artistas como Tony Delfino porque la atención al detalle en cada aspecto es impresionante. Desde la calidad del sistema de sonido, el mobiliario retro, la cristalería, la forma de los hielos de cada trago, hasta los portavasos tienen su importancia.  Y apenas vamos a empezar a hablar de la coctelería. El menú, inspirado en los clásicos pero reinventados, fue creado por la italiana Maura Lawrence Milia y Alex Lawrence Milia, quienes vienen de dos de los mejores bares del mundo, The Connaught y The Dandelyan, ubicados en Londres.  En este menú crearon 30 drinks que elaboran en un centro de producción y llegan aquí en barril, para que en el bar siempre pruebes los tragos estandarizados. Todos los que probamos tuvieron algo interesante, pero entre los que nos encantaron estuvieron: ...
  • Coctelerías
  • Roma
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
En la esquina de San Luis Potosí y Mérida, tras subir unas escaleras de concreto, llegamos a Fo + Ma, el recién abierto bar que va a marcar pauta en cuanto a coctelería en 2025. Las mentes detrás de esta propuesta son José Olivas y David Rocha, quienes vienen de una gran escuela, ya que ambos fueron parte de Handshake, hoy posicionado como el mejor bar del mundo según The World’s 50 Best Bars.  Fo + Ma (nombre corto para Form + Matter) es su nuevo proyecto, en el que, como el nombre lo dice, se clavaron tanto en la forma y la materia, que ellos mismos diseñaron cada rincón del espacio, el mobiliario, hasta las estaciones de trabajo, la iluminación sobre la barra (que permite a cualquiera tomar unas fotos dramáticas espectaculares) y, lo más importante para no dejar de crear, el laboratorio de cocteles en la parte posterior.  Pero este talento no para en ellos, aquí buscan ser semillero de talentos locales; y mientras tanto, todos los que ahora forman parte de Fo + Ma tienen experiencia en bares de renombre de la ciudad como Kaito, Palapa Cantina, Rayo o Hanky Panky. El resultado es un menú con mucha creatividad en el que cada uno de los trece cocteles está inspirado en una región del mundo.  Empezamos suave y coquette con el Lamington, que toma el nombre de un postre australiano de bizcocho con mermelada, por lo que este rosado coctel lleva vodka, frambuesa, coco, chocolate blanco y burbujas, decorado con frambuesa liofilizada. Aun con esos ingredientes, no fue demasiado...
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