Artes orientales

Reduce el estrés, fortalece el sistema inmune, mejora la relaciones interpersonales, disminuye la agresividad y la ansiedad, mejora de la concentración y la memoria. Estos son algunos beneficios que verás en tus hijos luego de algunas sesiones de meditación. 

 

Mucha gente dice que meditar es controlar tus pensamientos, pero más que eso, se trata del arte de reconocerlos y navegar por tu interior. Si te cuesta imaginar a tus muy activos hijos sentados durante unos minutos con los ojos cerrados y respirando, te recomendamos acercarte al Centro de Meditación Kadampa, tienen clases especialmente diseñadas para menores. 

 

Comienzan con una relajación de dos minutos, luego el maestro da una enseñanza de Buda, a través de un cuento o una narración, para posteriormente guiar la meditación y terminar la clase con una sesión de dibujo en la que los niños expresan lo que entendieron de todo esto.

kadampamexico.com

Gracias al cine y la TV, en las sociedades occidentales es común percibir a las artes marciales como deportes violentos. Sin embargo, la lista de beneficios que una buena práctica de karate, kung-fu, taekwondo, tai chi o alguna otra, puede aportarle a tus hijos es larga. Autodisciplina, socialización, trabajo en equipo, actividad física, logro de objetivos, aumento de autoestima, respeto, resolución de conflictos de manera no violenta, son sólo algunos.

En la ciudad abundan los lugares para aprender artes marciales. La selección de cuál es el mejor lugar para que tus hijos reciban clases debe ser tomada en conjunto.

Te recomendamos no sólo evaluar la conveniencia del lugar por su cercanía, horarios y precio.

Para poder obtener la mayor cantidad de beneficios, es importante que tanto tú como tu hijo visiten los centros que sean de su interés, conozcan su filosofía, observen las metodologías que aplican los maestros, platiquen con otros padres o alumnos, y juntos decidan cuál es la mejor opción.

Al arte japonés de doblar papel puede brindarle a tus hijos importantes lecciones. Al tratarse de una actividad en la que el logro de los objetivos se alcanza al seguir instrucciones, contribuye al fortalecimiento de habilidades sociales y al desarrollo cognitivo. Es una manera práctica y divertida de acercarse a las geometría y matemáticas. Adicionalmente, estimula una visión multicultural, al exponerlos a algunos aspectos de la cultura japonesa.

Los expertos que consultamos coinciden que el mejor lugar para que tus hijos aprendan y practiquen este arte es el Instituto Cultural Mexicano Japonés.

En cuanto a los materiales sólo necesitas lápiz adhesivo, tijeras, carpeta, hojas blancas, crayolas, papel origami y muchas ganas de aprender y pasártela bien.

icmj.edu.mx