La mundialmente reconocida compañía creada por la bailarina, maestra y coreógrafa, Amalia Hernández, ofrece al público la carrera de bailarín profesional de danza folclórica.
Sin embargo, no hay que esperar a llegar a edad universitaria para aprender y perfeccionar el zapateado de tres, el guachapeado o las carretillas, pues imparte clases de danza folclórica para niños de seis a 12 años en tres etapas (iniciación, elemental I y elemental II), así como un curso de verano en su Centro de Formación Dancística.