Con la cinta Pink Flamingos y el resto de la trilogía del mal gusto Female Trouble, así como la ultraviolenta Desperate Living, John Waters se ganó a pulso los títulos de padre y rey de la cultura basura, aunque también se convirtió en el héroe de aquellos inconformes con las estructuras sociales típicas y predecibles.
Pero Waters no es un psicópata cuyas perversiones hayan surgido por generación espontánea. O quizás si, pero en cualquier caso, el tipo del inconfundible bigote también es un vertedero de influencias.
Mis modelos de conducta es un compendio de perfiles de todos aquellos personajes que han ejercido una influencia en su vida. Desde cantantes mainstream de baladas pop, como Johnny Mathis, hasta pornógrafos homosexuales como Bobby García. También hay una defensa a psicópatas, como Leslie Van Houten, quien fue parte del clan de Charles Manson, y un homenaje a todas las figuras de su natal Baltimore.
Mis modelos de conducta. John Waters. Caja Negra Editora.
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